jueves, febrero 02, 2006

TERCER SUEÑO

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Mi vida académica ha sido de lo más accidentada, de hecho hay períodos de colegio que no recuerdo bien o que se me mezclan. La verdad es que era frecuente que me pusieran en el colegio y me retiraran a mitad de año, por problemas de salud y de clima. Estuve en esa situación a lo menos tres o cuatro veces, entre los siete y los diez años, a esa altura, había logrado la hazaña de llegar a tercero básico, pero me retiré nuevamente por problemas de salud y me dio vergüenza volví al año siguiente con la edad que tenía. Así pasaron los años, entre que iba a trabajar a la feria con mi mamá, al campo, vagaba en las tardes por Coronel, sacaba pescado en la playa y estuve un tiempo yendo a la casa de mi tío.

Esto último merece párrafo, él era pastor evangélico y tenía unos comedores, que mantenía con ayuda de una fundación, ahí la pasaba de lo mejor, llegaba como a las 11.00 am, ayudaba a limpiar y a servir, también comía, y tenía varios amigos. El camino para llegar a los comedores también era hermoso, se trataba de una vega, es decir un prado grande y verde con animales y algunos árboles. De vuelta me gustaba quedarme durmiendo siesta bajo un árbol y llegaba como a las 6 de la tarde a mi casa, sólo para la once.

En ese entonces me comenzó a gustar una de las cocineras, se llamaba Elizabeth, creo que la recuerdo más linda de lo que era, supongo que pasa con el primer amor. La historia fue corta, ella era un poco mayor, por lo que creí que no tenía ninguna posibilidad, al final dejé de ir a los comedores, los que además fueron cerrados ese mismo año, por falta de fondos. A Elizabeth sólo la vi una vez más, años después quise saber de ella, tuve la mala idea de preguntar; me dijeron que un camionero la había embarazado y la había abandonado; mejor me hubiera quedado con el recuerdo.

En eso yo ya tenía 16 años y debía volver a estudiar.